El sacerdote Gerardo Joannon enfrenta un duro dilema, o se va a Argentina a cumplir con la sanción recibida por la Congregación de los Sagrados Corazones o deberá enfrentar su expulsión de la orden religiosa.
Esto, tras negarse a a tomar el avión que el pasado 28 de marzo lo llevaría al país trasandino y así obedecer con el dictamen emitido por Alex Viguera, superior de los SSCC en Chile, luego que se determinara su participación en casos de adopciones irregulares en plena dictadura.
Pero el castigo a Joannon también consideraba la prohibición de recibir visitar de la psicóloga María Carolina Celedón, una de las víctimas de estas adopciones irregulares y que además tendría “una relación inapropiada” con el sacerdote, según la investigación eclesiástica desarrollada por David Albornoz.
Frente a esta situación, Emol consignó que a Gerardo Joannon se le concedió un nuevo plazo para concretar su viaje a Argentina, como lo estipuló la comunidad religiosa en enero pasado, o se iniciarán los trámites para su expulsión definitiva de los Sagrados Corazones.
La orden decidió castigar al sacerdote, a pesar de que el Vaticano determinó que las faltas cometidas por Joannon “no configuran delito canónico imputable”, ya que si bien se determinó su participación en los casos de adopciones irregulares, estas faltas estaban prescritas.
Así, debió viajar en un primer momento a Argentina el pasado 14 de marzo, pero este traslado se pospuso dos semanas ante problemas de salud presentados por Joannon, tras lo cual se decretó la fecha de su viaje para el 28 de marzo, lo cual tampoco de concretó, lo cual hizo a los SS.CC analizar la drástica decisión de expulsarlo si no cumple con la sanción establecida.
