Revuelo a nivel nacional provocaron las declaraciones de la atleta Érika Olivera, la que en la revista El Sábado declaró en una entrevista haber sido objeto de abusos sexuales por parte de su padrastro.
Esto habría ocurrido durante 13 años y desde el mundo deportivo, social y político, valoraron su valentía.
Ahora, en una de las diversas declaraciones de apoyo, también se sumaron voces que llamaban a que se declararan imprescriptibles este tipo de delitos.
El punto es que en esta jornada, de acuerdo a Radio Bío-Bío, el Fiscal Regional de la zona Sur, Raúl Guzmán, confirmó la apertura de una investigación en contra del padrastro de la deportista, Ricardo Olivera.
El persecutor indicó que ya se realizaron las primeras diligencias y especificó que no se puede referir a esta indagatoria, la que actualmente está en curso.
El persecutor designado para llevar esta causa es Rodolfo Herrera, el fiscal de Puente Alto.
La deportista fue citada, pero por compromisos en el extranjero, esta declaración se debió posponer.
