Fueron 15 los sacerdotes, de un total de 68 que hay en la diócesis de Rancagua, los que recibieron el llamado telefónico del Obispo de esa ciudad, Alejandro Goic, diciéndoles que estaban suspendidos de su cargo.
Esto luego del reportaje de Canal 13 donde se destapó el caso de una cofradía sexual en la diócesis de Rancagua. En la investigación se evidenció que el párroco de Paredones, Luis Rubio, enviaba imágenes sexuales y de desnudos a un supuesto menor de edad.
La acción de Goic, según publicó La Tercera, es de carácter temporal “mientras se efectúa la revisión de cada caso”.
Recordemos que tras la emisión del reportaje televisivo, la autoridad religiosa salió a pedir perdón por actuar con poca “agilidad” ante presuntas “conductas impropias” de los religiosos.
