Camilo Castaldi, más conocido como Tea Time, sacó la voz tras el proceso judicial que enfrentó por violencia doméstica contra su ex pareja Valentina Henríquez, apuntando que ya fue condenado por la opinión pública, sin esperar el término del juicio.
El músico grabó una entrevista para el late “Síganme Los Buenos”, conducido por Julio César Ródriguez, quien adelantó parte de la conversación en radio Biobío.
“Ha sido un año complicado, por las acusaciones contra mí. Eso trajo un cambio rotundo de vida, pero trajo cosas buenas también porque yo me di cuenta que la vida, de la forma cómo la estaba llevando, iba a terminar mal. Si no era eso, iba a ser lo otro, pero ahora desperté, me pude centrar en mi núcleo familiar, en una mente clara de ver las cosas en el mundo”, expresó.
Junto con ello, el ex vocalista de Los Tetas dejó en claro que “el proceso judicial quedó en suspensión, con una orden de alejamiento por dos años y shows en colegios que voy a enseñar a los niños cursos de poesía o concierto. Yo quedé bien contento por eso, de una forma, porque se acabó. Quería comenzar una nueva vida”.
“Yo quería llegar al final del juicio, porque era mi oportunidad de llamar a todos los testigos y aclarar la situación frente a todo Chile (…) Se me apuntó como culpable desde un inicio, sin nadie esperar el proceso legal (…) Yo sé lo que hice y lo que no hice y por eso camino tranquilo desde el día 1 en la calle. Preferí mantenerme en calma y hacer las cosas judicialmente”, argumentó.
Consultado sobre su relación con Valentina Henríquez, Castaldi explicó que “era una relación tóxica, de dos personas enfermas. Las relaciones tóxicas se construyen de a dos, yo en 20 años de carrera jamás tuve un episodio de violencia. Mucha gente se sorprendió cuando salió esto y me defendió”.
En la misma línea, el músico dejó en claro que nunca golpeó a Henríquez cuando vivían juntos, apuntando que enfrentaron un espiral de violencia que no pudieron detener.
“Yo no la golpeaba. Lo que ocurrió en muchas ocasiones, con su madre presente, cuando ella entraba en desesperación ocurrió una escalinata que no se podía frenar, en donde se empezaba a crear un caos de una magnitud gigante, volaban cosas, yo me tenía que defender. Muchos vecinos escucharon la dinámica de como ella me trataba y como yo la trataba”, sentenció.
