En el XI encuentro del Grupo de Lima que se realiza en Bogotá, Colombia, el canciller del país anfitrión, Carlos Holmes Trujillo, y el viceministro de Relaciones Exteriores de Perú, Hugo de Zela Martínez, mostraron su negativa a la respuesta que dio el Gobierno de Nicolás Maduro al ingreso de la ayuda humanitaria el pasado sábado 23 de febrero, que terminó con al menos cuatro fallecidos y 200 heridos.
No obstante, aseguraron que era falso que estuviesen considerando el uso de la fuerza para ingresar a Venezuela. “Eso es falso, eso no ocurre. El Grupo de Lima no tiene una posición intransigente, ha venido apoyando una solución pacífica en Venezuela. El único diálogo posible es apoyar lo que dice la Constitución de Venezuela, es decir, al gobierno legítimo de Juan Guaidó le corresponde llevar la transición, la salida del dictador y convocar a elecciones libres“, aseguró el viceministro de Perú.
No obstante, recalcaron que sí van a intensificar su presión política y diplomática para provocar un mayor “aislamiento de la dictadura”. Es más, especificaron que su objetivo es que más países se unan en esas acciones.
Esto ya que el pasado 23 de febrero marcó un punto de quiebre ante la comunidad internacional, debido a que consideraron como violenta la respuesta de Maduro. “Estamos viviendo un momento crítico después del 23, cuando la dictadura mostró su cara represiva, no cabe duda de que la dictadura no tiene límites“, reiteró de Zela Martínez.
Con aquello concordó el canciller colombiano Holmes Trujillo, quien aseguró que el intento de ingresar la ayuda humanitaria a Venezuela terminó siendo un episodio más de represión. Tras esto, señaló que van a intensificar el apoyo e intentarán cerrarle el “cerco a Maduro”.
