Un día después de haber sido condenado a 28 años de cárcel por el asesinato de Narumi Kurosaki, Nicolás Zepeda apeló a la decisión del Tribunal Penal de Doubs, Francia. Un nuevo juicio debe ser realizado en 2023 o 2024, donde la justicia evaluará si acepta o no el recurso presentado por la defensa del chileno.
Zepeda recibió el veredicto por el asesinato de su ex novia Narumi Kurosaki este martes. Previo a esto, tuvo una última oportunidad para dirigirse a los jueces y los civiles presentes en la audiencia. Una vez más, dijo que no era el culpable.
“Nunca quise estar en medio del dolor de la familia de Narumi, nunca quise estar en medio del dolor de mi propia familia, de mi propio dolor, pero no soy un asesino, no soy el asesino de Narumi”, dijo el joven en francés antes de que el jurado se retirara para deliberar.
Tras la declaración del imputado, el juicio fue cerrado en su contra. Después, los tres jueces y los seis integrantes civiles del jurado se retiraron de la audiencia para deliberar a puerta cerrada.
Cada uno entregó sus impresiones del caso y ellos necesitaban coincidir en las siguientes materias: si era posible concluir que Zepeda había matado a Narumi tras la revisión de testimonios y evidencias y que el asesinato fue cometido de manera premeditada; analizar si era un agravante el hecho que el acusado y la víctima habían tenido una relación sentimental.
El juicio
Durante los últimos doce días, amigos de Nicolás Zepeda y Narumi Kurosaki, un primo del chileno, el encargado de los estudiantes japoneses en la universidad de Besanzón y familiares de la joven japonesa entregaron sus testimonios.
Uno de los más conmovedores fue el de Taeko Kurosaki, la madre de Narumi, quien dijo que sufre demasiado con la pérdida de su hija.
