El router juega un rol trascendental en el funcionamiento del servicio de internet hogar. Gracias a este dispositivo puedes acceder a una conexión rápida y segura que te permita realizar sin problemas diferentes actividades como navegar por redes sociales, llevar a cabo trabajos de ofimática y ver contenido en plataformas de streaming.
Cada vez más chilenos tienen acceso a internet, por ejemplo, según la Subsecretaría de Telecomunicaciones (SUBTEL), hasta septiembre de 2021 el 67,48% de los hogares del país contaba con una conexión de internet fija, por lo que es importante conocer la tecnología que da soporte a este servicio.
Router: puente entre tus dispositivos e Internet
Un router representa el punto de conexión entre una red local e Internet, que se encarga de dirigir y gestionar el tráfico de datos entre los dispositivos conectados, y permite que varios dispositivos, como computadores, teléfonos móviles o tablets, compartan una misma fuente de conexión, como sucede con tu internet hogar.
De este modo, los routers actúan como un punto de acceso central de conexión, calculando dentro de una red de área local (LAN), cuáles son las mejores rutas para transmitir de forma rápida, segura y eficiente los paquetes de datos a la dirección IP de cada dispositivo.
¿Cómo funciona un router?
Los routers operan en conjunto con un módem, dispositivo que tiene acceso a la red para recibir e interpretar la señal del proveedor de internet. Actualmente, ambos componentes vienen incluidos en un mismo hardware, permitiendo optimizar su funcionamiento.
De esta forma, el router recibe paquetes de datos por parte de los dispositivos que conforman la red local, los cuales reenvía al módem para que este componente envíe esta información al servidor de internet, con el fin de que este le sirva los datos requeridos.
Posteriormente, para que los paquetes de información solicitados viajen desde el servidor de internet hacia los dispositivos conectados, se sigue el proceso inverso. Esto es, desde el servidor se envían los datos al módem, y luego este tráfico se transmite al router.
En este punto, el router funciona como canalizador de esta información, y se encarga de determinar cuáles son las mejores rutas para distribuir los paquetes recibidos. Finalmente, al definir las vías de transmisión más apropiadas, este dispositivo se encarga de distribuir los datos a la dirección IP de cada dispositivo, con el objetivo de garantizar que lleguen al destino adecuado.
Funcionalidades de un router
En resumen, un router ofrece las siguientes funcionalidades:
- Enrutamiento: como principal tarea, un router determina las mejores vías para transmitir los paquetes de datos a cada dispositivo conectado a la red, asegurando una eficiente conexión a internet.
- Punto de conexión inalámbrica: facilita la conectividad inalámbrica a internet, sin necesidad de cables, permitiendo que dispositivos móviles puedan acceder a una red WiFi sin inconvenientes.
- Ethernet: también permite la conexión física en una red local mediante un cable ethernet, garantizando una rápida, estable y segura transferencia de datos entre los dispositivos.
- Puertos USB: este dispositivo integra puertos USB que permiten la conexión de periféricos como las impresoras. Así puedes compartir estos recursos en tu red local para imprimir de forma inalámbrica desde cualquier dispositivo.
- Seguridad: muchos routers integran herramientas como firewall y filtrado de paquetes para evitar amenazas externas. En este aspecto, pueden bloquear direcciones IP o puertos que presenten actividades sospechosas.
Esta es la información más relevante vinculada a un router. Recuerda que para acceder a un óptimo servicio de internet hogar, es necesario contar con un dispositivo que garantice una eficiente transmisión de datos entre tus dispositivos.
