Los Juegos Panamericanos Santiago 2023 en la educación chilena
Por Cristián Meza
La 19° versión de Juegos Panamericanos y su llegada a Chile marca un hito no solo por ser la primera vez en que el país sirve de anfitrión para la actividad, sino por la vocación social que compromete su organización, orientada a crear instancias participativas para la comunidad mediante el Programa de Educación Santiago 2023 en colaboración con Grupo Educativo.
Este programa busca fomentar la interacción entre el evento y los habitantes del país más allá de la experiencia como público, instalando el rol social del deporte por medio de una plataforma de capacitación online gratuita y abierta que entrega capacidades y conocimientos, para profesoras y profesores de educación física y profesionales del deporte, en línea con los objetivos de desarrollo sostenibles definidos por la ONU.
Los cuatro módulos que integran el Programa fueron desarrollados por Grupo Educativo, junto a profesionales del deporte y por encargo de Santiago 2023.
Con esto se busca aportar al desarrollo del país con un plan integral para la educación que unido a los trabajos de mejora en infraestructura de piscinas, canchas y espacios de entrenamiento que involucra la inversión de los Juegos Panamericanos, conforman parte del legado de este evento para nuestro país.
La clave del progreso
Los módulos creados por GE, en colaboración con el Programa de Educación de los Juegos Panamericanos Santiago 2023, está enfocado a los procesos tanto como al resultado y guarda estrecha relación con la actual Agenda de Educación Pública: recuperar el compromiso social de la educación, fomentando la asistencia y permanencia escolar perdida luego de la pandemia y años de virtualidad, cuyos efectos golpean mayormente a regiones y provincias del país.
Sobre lo anterior, Paulina Araneda, directora ejecutiva de Grupo Educativo y presidenta de la Agencia de Calidad de la Educación, señala “En la región de Atacama hay más de 30 mil estudiantes que llevan 50 días sin poder asistir a clases. Estas condiciones profundizan aún más la brecha educacional, además de disminuir la posibilidad de niñas, niños y adolescentes para imaginar un futuro profesional en el deporte”.
