
Gabriel Massuh Isaías es un empresario chileno nacido en Ecuador, que estudió agronomía en Cornell University y Negocios en Florida International University. En 1993, a la edad de 23 años, emigró solo desde Ecuador hasta Chile y creó Bagno, que hoy cuenta con una moderna infraestructura y una red de sucursales a lo largo del país.
Bagno es una empresa líder en la importación de plátanos y frutas de clase mundial en Chile, que abastece a supermercados, restaurantes y clientes de canal tradicional.
Este empresario sabe lo que es emprender desde cero, enfrentar obstáculos, superar crisis y alcanzar el éxito. Por eso, en este artículo, nos comparte 7 consejos para crear una empresa en Chile, basados en su propia experiencia y trayectoria.
Visión clara y propósito definido
Lo primero que debes tener para crear una empresa es una visión clara de lo que quieres lograr y un propósito definido que te motive y te impulse a seguir adelante. Gabriel Massuh Isaías tenía claro que quería dedicarse al negocio de las frutas, y que su propósito era ofrecer productos de calidad y frescura a los consumidores chilenos.
“Mi visión era traer frutas tropicales que no se podían cultivar en Chile, y que fueran de la mejor calidad posible. Mi propósito era satisfacer las necesidades de los clientes y contribuir al desarrollo del país”, afirma.
Investigar el mercado y buscar oportunidades
Antes de lanzarte a crear una empresa, debes investigar el mercado en el que quieres operar, conocer a tus potenciales clientes, competidores y proveedores, y buscar oportunidades que te permitan diferenciarte y aportar valor.
Gabriel Massuh hizo un estudio de mercado exhaustivo, y descubrió que había una gran demanda de plátanos y otras frutas tropicales en Chile, pero que la oferta era limitada y de baja calidad. “Vi una oportunidad de traer frutas de Ecuador, que tiene un clima ideal para su cultivo, y de ofrecerlas a un precio competitivo y con una calidad superior”, explica.
Perseverancia y enfrentar dificultades
Crear una empresa no es fácil y requiere de mucho esfuerzo, dedicación y sacrificio. Te encontrarás con muchas dificultades, rechazos y fracasos, pero no debes rendirte. Gabriel Massuh tuvo que enfrentar varios desafíos al llegar a Chile, como adaptarse a una nueva cultura, ganarse la confianza de bancos, proveedores y clientes. “Fue un camino duro, pero nunca me di por vencido. Siempre tuve fe en mi proyecto y en mis capacidades, y seguí trabajando con pasión y determinación”, dice.
Aprender de los errores y mejorar constantemente
Crear una empresa es un proceso de aprendizaje continuo, en el que debes estar dispuesto a reconocer tus errores, aprender de ellos y mejorar constantemente. Massuh Isaías cometió algunos errores en sus inicios, como no tener un control adecuado de sus inventarios, no diversificar sus fuentes de financiamiento, o no delegar suficientemente.
“Me di cuenta de que tenía que mejorar en varios aspectos, y por eso busqué asesoría, capacitación y apoyo de otras personas. También implementé sistemas de gestión, calidad y seguridad, y fui incorporando nuevas tecnologías y procesos”, comenta.
Innovar y crear valor para los clientes
Crear una empresa no es solo ofrecer un producto o servicio, sino crear valor para tus clientes, que satisfaga sus necesidades, expectativas y deseos. Para ello, debes innovar constantemente, buscando nuevas formas de hacer las cosas, de resolver problemas, de generar experiencias y de crear impacto.
El empresario chileno-ecuatoriano ha innovado en varios aspectos, como en la selección, el transporte, el almacenamiento, la distribución y la presentación de sus frutas. “Siempre estoy buscando nuevas formas de mejorar la calidad, la frescura, la variedad y la disponibilidad de mis productos, y de ofrecer un servicio de excelencia a mis clientes”, señala.
Cuidar el equipo y fomentar una cultura empresarial
Crear una empresa no es una tarea individual, sino colectiva, que requiere de un equipo de trabajo comprometido, motivado y capacitado. Por eso, debes cuidar a tu equipo, reconociendo su esfuerzo, incentivando su desarrollo, y fomentando una cultura empresarial que refleje tus valores, principios y objetivos.
“Mi equipo es mi familia, y los trato con respeto, confianza y cercanía. Les doy oportunidades de crecimiento, de participación y de bienestar. Y les transmito una cultura de trabajo basada en la calidad, la responsabilidad, la innovación y la solidaridad”, indica.
Responsabilidad y contribuir al desarrollo socioambiental
Crear una empresa no es solo generar beneficios económicos, sino también generar beneficios sociales y ambientales, que contribuyan al desarrollo sostenible de la sociedad y del planeta. Por eso, debes ser responsable con el impacto que generas, y buscar formas de aportar al bienestar de las personas y al cuidado de la naturaleza.
Gabriel Massuh tiene un fuerte compromiso social y ambiental, y lo demuestra con diversas acciones, como apoyar a fundaciones, escuelas y comunidades, promover el consumo saludable de frutas, reducir el uso de plásticos y reciclar sus residuos. “Creo que como empresario tengo una responsabilidad con la sociedad y con el medio ambiente, y por eso trato de hacer las cosas bien, y de dejar una huella positiva en el mundo”, declara.