Gaspar Rivas asegura que diputada Cordero le diagnosticó síndrome de Tourette y que además padece TOC
Esto, luego de la polémica con sus compañeros del PDG, Víctor Pino y Yovana Ahumada, a quienes calificó de “conchasdesumadres”.
Por Cristián Meza
"Eso, aparentemente y según lo que dice la doctora María Luisa Cordero, sería una condición inherente mía y tengo que aprender a controlarla y convivir con ella". AGENCIA UNO
El diputado Gaspar Rivas (PDG) se refirió a la polémica que protagonizó por los duros epítetos a sus compañeros de partidos Víctor Pino y Yovana Ahumada, a quienes tildó de “conchadesumadres”.
Esto, luego que fuera sacado de la Comisión de Adultos Mayores y Discapacidad por Ahumada, jefa de la bancada del PDG, por estar en contra a la censura de la presidenta de la instancia, la PPD Carolina Marzán.
Ante este episodio, el parlamentario dio a conocer un comunicado, donde explicó que esta reacción responde a que padece de Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), mientras que la diputada María Luisa Cordero (IND-RN) lo diagnosticó con síndrome de Tourette.
Gaspar Rivas expresó que está diagnosticado con TOC “desde el año 2003 por una médico psiquiatra de Los Andes. Desde esa época estoy tomando fármacos antidepresivos para subir mis niveles de serotonina y el nivel de corteza cerebral”.
En esta línea, precisó que “una vez en el Parlamento, este año 2022, yo pude compartir con la doctora Cordero, quien es médico psiquiatra y ella pudo darse cuenta (y) percibir efectivamente -a través de mi comportamiento- que yo evidenciaba rasgos de TOC”.
“El devenir diario en la Cámara nos llevó un día a entablar una conversación. Yo tuve por lo menos un par de entrevistas, decisiones -por así decirlo- con ella, que muy amablemente dijo yo quiero conversar contigo, Gaspar, y reconfirmó el diagnóstico de TOC, también con un cuadro asociado -y bastante típico dentro del TOC- de depresión”, detalló Gaspar Rivas.
Síndrome de Tourette
Pero Rivas planteó que, luego de sus polémicos dichos contra sus compañeros del PDG, Cordero “se me acercó y me dijo que desde su punto de vista, su diagnóstico clínico, consideraba que yo, además de la depresión y el TOC, tenía un cuadro del síndrome de Gilles de Tourette”.
El diputado del PDG indicó que este trastorno “es una condición que hace que la persona, en ciertos estados de ánimo, se exprese a través de palabras de grueso calibre. Y es efectivo, normalmente yo, ante situaciones de ansiedad, muchas veces expreso mi ansiedad, mi molestia a través de palabras groseras o epítetos”.
“Eso, aparentemente y según lo que dice la doctora María Luisa Cordero, sería una condición inherente mía y tengo que aprender a controlarla y convivir con ella, puesto que normalmente este tipo de condiciones psicológicas -como en este caso lo que ella dice del síndrome de Gilles de Tourette- pueden controlarse, pero es muy difícil eliminarlas”, sentenció.
