Emilia Ríos salió al paso del informe de Contraloría que detectó una serie de irregularidades entre enero y septiembre de 2024, en el marco de su campaña para ser reelegida como alcaldesa de Ñuñoa.
En dicho informe, Contraloría dio cuenta de mal uso de vehículos municipales, pagos de horas extras no acreditados a funcionarios y deficiencias en la rendición de $6 mil millones, entre otras falencias.
Ante esta situación, la actual subsecretaria de Deportes expresó en sus redes sociales que “luego de una exhaustiva fiscalización, el resultado de este proceso arroja observaciones que solo se refieren a aspectos puntuales y específicos, propios de la gestión administrativa”.
Emilia Ríos agregó que “este informe expone fallas administrativas de orden menor y no da cuenta de ninguna situación que no pueda ser subsanada en el plazo indicado por Contraloría para responder aspectos pendientes y observaciones”.
“Por el contrario, de este informe no se desprende ningún antecedente que sea indicativo de problemas que excedan el mero ámbito administrativo”, puntualizó la ex alcaldesa.
Frente a esta situación, el actual alcalde de Ñuñoa, Sebastián Sichel, anunció que tomará acciones legales, aseverando que “hay fraude en las cuentas, ahí perseguiremos responsabilidades penales”.
“Se ratifica lo que dijimos: hay un desorden administrativo, hay uso de las instituciones con fines políticos para beneficiar particularmente a un sector político, particularmente al Frente Amplio y la administración anterior; y tercero, hay un disfraz de las verdaderas cifras”, sentenció.
