La elección presidencial marcó este 2025. La declaración de candidaturas en la derecha a principios de año y la primaria del oficialismo decantó en un prematuro entusiasmo presidencial.
En los casi doce meses de contienda electoral, fueron varios los hitos que marcaron el desarrollo de la carrera por La Moneda y que terminaron con José Antonio Kast (Partido Republicano) y Jeannette Jara (Unidad por Chile) instalados en el balotaje. Acá un recuento de los episodios más significativos de la campaña.
La fracasada primaria de Chile Vamos
En paralelo al acuerdo en el oficialismo para establecer una primaria legal con el fin de determinar a la candidata única del sector, en Chile Vamos se buscó infructuosamente dar con un elenco de candidatos para tener primarias propias con Evelyn Matthei como protagonista.
El primer llamado fue para José Antonio Kast, Johannes Kaiser y Ximena Rincón. Los dos primeros rechazaron la invitación aludiendo a diferencias de fondo en los proyectos políticos. La senadora se vio impedida de participar en una primaria ya que su partido, Demócratas, no estaba constituído a nivel nacional al momento de la inscripción de las primarias.
La opción que tomó Chile Vamos fue realizar una primaria “acotada”: los escogidos fueron Francisco Chahuán y Rodolfo Carter. Sin embargo, fue la misma Matthei quien le bajó el pulgar a esta opción. Las razones fueron variadas: el poco peso político de los contendores, el enredo de Chahuán con su militancia y la sensación de que no iba a ser una primaria real.
Con la determinación, la coalición de centro derecha optó por competir directamente en primera vuelta, lo que le costó a la postre una nueva derrota ante Kast.
Jara gana la primaria del oficialismo
Carolina Tohá fue la primera en salir del gabinete para lanzar su candidatura presidencial. La ex ministra del Interior confiaba en un triunfo contundente dada su gestión en seguridad —principal tema de preocupación— y su tonelaje político. Pero la irrupción de Jara volcó el tablero de la alianza progresista.
La ex ministra del Interior fue alzada —a regañadientes— por el PC como candidata, y con la reforma de pensiones como capital político, logró lo que era impensado hasta principios de 2025; que una comunista fuese la líder de coalición y representante del arco progresista en la presidencial.
En el camino también quedó Gonzalo Winter (FA), uno de los principales líderes del Frente Amplio.
En todo caso, la aplastante victoria de Jara fue agridulce. Un poco más de un millón trescientas mil personas votaron en la primaria, número considerablemente menor a la primaria de 2021 en que triunfó Boric.
La caída de Matthei en encuestas y los descuelgues
La victoria de Jara tuvo como consecuencia directa el desplazamiento de Matthei en las encuestas. La abanderada de Chile Vamos, que encabezó por más de un año los sondeos de opinión, salvo algunas semanas en que asomó Johannes Kaiser, pasó a ocupar el tercer lugar tras la primaria.
Jara se consolidó en primer lugar de cara a la primera vuelta, y Kast se estableció como la primera opción de la derecha. Matthei, entre errores no forzados y modificaciones de su comando, no logró nunca retomar el primer lugar de los sondeos lo que la llevó a adoptar estrategias cuestionadas por sus mismos adherentes.
Esa situación decantó en múltiples descuelgues. Carlos Larraín, Claudio Alvarado, Roberto Ampuero, entre otras figuras históricas y autoridades de Chile Vamos se declararon partidarios del republicano en desmedro de Matthei.
Denuncia de bots
A fines de julio, Evelyn Matthei denunció una “campaña sucia” en su contra que difundía videos manipulados para dar la impresión de que padecía Alzheimer. La candidata calificó estos ataques como una “campaña asquerosa” que atribuyó al Partido Republicano y amenazó con llevar el caso a los tribunales.
Un grupo de senadores de Renovación Nacional, comandados por Francisco Chahuán y Rafael Prohens, planeó presentar una querella por infracción a la ley que regula la alteración de datos informáticos. Sin embargo, la presión de otros sectores de Chile Vamos terminó por sepultar la arremetida judicial.
La acusación de Matthei, que interpeló la manera de hacer campaña de Kast, tensionó la relación entre ambos candidatos al punto en que Matthei puso en duda su apoyo de segunda vuelta al republicano hasta el día de la primera vuelta.
El quiebre entre el PC y Jara
Varios fueron los episodios en que Jara hizo ver su molestia con Lautaro Carmona y Daniel Jadue. Pero el más significativo fue cuando transparentó en público el motivo de su molestia con los dirigentes PC: “A veces (con Lautaro Carmona) entendemos la responsabilidad que me toca asumir como candidata a la Presidencia de forma distinta. Creo que ahí hay una forma muy distinta de ver la política, porque yo por lo menos lo expreso como falta de fraternidad”, declaró la abanderada a TVN en septiembre.
Desde su victoria en las primarias, Jara se vio complicada en varias ocasiones por las intervenciones de los liderazgos del PC. Uno de los momentos más tensos ocurrió cuando Carmona, desde Ciudad de México, criticó la gestión de Mario Marcel en Hacienda justo cuando Jara intentaba dar señales de responsabilidad fiscal.
En el Socialismo Democrático incluso se llegó a acusar que “el PC ya soltó la candidatura de Jara”. Finalmente, Jara marginó a la directiva de su comando, instalando a figuras como Daniel Núñez —de la disidencia— en lugares preponderantes de la campaña.
La casi renuncia de Jara al PC
Uno de los momentos de tensión entre Jara y los dirigentes de su partido fue cuando, a cuatro días de ganar la primaria, Daniel Jadue desató un enredo al adelantar públicamente que Jara suspendería su militancia. “Efectivamente se ha tomado la decisión, entiendo yo, de que suspenda su militancia”, dijo el exalcalde en su programa Sin Maquillaje, desatando la molestia del ala del PC afín a Jara.
La idea de congelar su adhesión al PC para dar un gesto de amplitud a la centroizquierda venía siendo considerada por la candidata desde antes de la elección del 29 de junio. El Comité Central tenía un acuerdo de avanzar con la decisión y darla a conocer en el acto del 113° aniversario del partido.
Sin embargo, el hecho de que Jadue se adelantara llevó a Jara a postergar el anuncio y finalmente descartar la suspensión, a lo menos, en tiempo de campaña.
En todo caso, Jara reafirmó en el último debate organizado por ANATEL que renunciaría a su militancia en caso de llegar a La Moneda.
Segunda vuelta: cae Darío Quiroga
Apenas terminada la primera vuelta, el comando de Jeannette Jara sufrió un remezón con la salida de su coordinador estratégico, Darío Quiroga. La candidata le pidió la renuncia tras reflotarse declaraciones del sociólogo contra Franco Parisi y su hermana Zandra, diputada electa del Partido de la Gente.
En un programa de streaming de abril, Quiroga había hecho comentarios despectivos contra la estructura del PDG, calificándola de “chanta” y “pobre”, justo cuando Jara buscaba captar los votos de Parisi, quien había obtenido casi el 20% en primera vuelta.
Jara tomó distancia de los dichos y los calificó como “inadecuados”, señalando que “a mí no me gustan los dichos clasistas, yo no soy esa clase de persona”. Todo esto, mientras voces del oficialismo venían cuestionando el protagonismo de Quiroga.
Fuerzas del rechazo se decantan por Kast
Tras los resultados de primera vuelta, José Antonio Kast logró su objetivo de articular a todas las fuerzas que fueron parte de la campaña del Rechazo. Además de su partido, ya estaban arriba de su campaña Chile Vamos, los nacional libertarios y el centro proveniente de la ex Concertación.
Johannes Kaiser, del Partido Nacional Libertario, reconoció su derrota apenas ingresaron los resultados preliminares y anunció su respaldo al republicano: “Vamos a respaldar su candidatura en la segunda vuelta, porque la alternativa es la señora Jara”.
Evelyn Matthei también entregó su apoyo a Kast pese a las diferencias históricas entre ambos sectores. Sin embargo, analistas advirtieron que muchos de sus 1,6 millones de votantes constituían principalmente “un voto anti-Kast” más que un respaldo natural al republicano.
El hito final llegó a principios de diciembre cuando dirigentes de Demócratas se reunieron con Kast para expresar su respaldo personal.