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21 de Enero de 2012

Columnista español asegura que Alexis es la “nueva vitamina” del Barça

"Con esta vitamina, el Barça vive más tranquilo, gana tensión defensiva, es más rico tácticamente, más incisivo y los artistas desequilibrantes disponen de más espacio entre líneas para marcar diferencias. Todo un tesoro. ", dice Ricard Torquemada de El Mundo Deportivo.

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“Los dos últimos partidos del Barça han manifestado el descubrimiento de una nueva vitamina que enriquece el organismo blaugrana y tiene nombre propio: Alexis. Su inicio ha sido un poco irregular por culpa de una lesión inoportuna y el imprescindible proceso de adaptación a una idea colectiva tan compleja como específica. Alternó notables actuaciones como en el Bernabéu en la Supercopa o los minutos previos a la lesión en San Sebastián, con goles valiosos como el que marcó contra el Madrid en la Liga o los dos ante el Rayo Vallecano y con obras que sembraron alguna duda como contra el Espanyol.

Sin embargo, en la última semana ha confirmado todos los valores positivos que había insinuado. Contra el Betis ganó confianza con maniobras antinaturales llenas de éxito, en forma de un pase interior a Cesc y un centro preciso al primer toque con el interior del pie izquierdo, que utiliza simplemente como último recurso, para que Messi marcase el segundo.

Luego, en los momentos de más sufrimiento en la Liga, apareció para dar vida al Barça con su talento natural en el desmarque profundo, lo que le dio un mano a mano frustrado por Casto, un cabezazo alto y una posibilidad de enseñar su contundencia en el remate para devolver la ventaja en el marcador. Toda esta colección de acciones positivas sólo fueron el preámbulo de su mayúscula exhibición en Madrid.

Su polivalencia y disciplina para interpretar cada posición como necesite el equipo le permiten jugar en la derecha para jugar en profundidad, en la izquierda para combinarla con diagonales que inviten a su chut de rosca, o en el centro, en la nueva variante de Guardiola del ‘nueve pequeño’, donde su insistencia en ir en largo abre líneas de pase al espacio y chafa la defensa rival para aumentar la zona entre líneas.

En Madrid, iba desde la derecha para dentro y fue el pellizco ideal a los centrales blancos por su amenaza continua en profundidad. Así, invitó a Cesc a un pase que cabeceó al palo en una maniobra dificilísima y el árbitro le birló una opción de encarar a Casillas por un fuera de juego inexistente. Además, también fue preciso en su primer toque, su gran asignatura pendiente hasta ahora, tanto en la combinación como en el control orientado; siempre se ofreció para descargar a los compañeros que recibían presión sobre el balón; fue intenso en la presión y la transición defensiva; orgulloso en la protección del balón para dar valor a la posesión; agresivo en la pelota dividida; y valiente en la toma de decisiones.

Con esta vitamina, el Barça vive más tranquilo, gana tensión defensiva, es más rico tácticamente, más incisivo y los artistas desequilibrantes disponen de más espacio entre líneas para marcar diferencias. Todo un tesoro, que aún será más valioso cuando se atreva más al uno contra uno y relaje su pie para ser más delicado técnicamente…”

Sigue leyendo el resto de la columna en Mundo Deportivo

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