Secciones
Entretención

VIDEO – La burlesca celebración de Luis Mateucci tras vencer a Pangal en ¿Ganar o Servir?

Después de ocho competencias, el argentino finalmente logró vencer a su principal rival y celebró burlándose de él.

El episodio de este domingo de ¿Ganar o Servir? estuvo marcado por una nueva competencia individual masculina, donde Luis Mateucci logró vencer a Pangal Andrade. A raíz de este hito, es que el argentino celebró de manera burlesca frente al deportista.

La prueba estuvo centrada en la suerte, igual que la que protagonizaron las mujeres, pues tenían que ir a buscar piezas para hacerlas calzar en un tablero, pasando por obstáculos de equilibrio.

Al final de la apretada carrera en ¿Ganar o Servir?, Luis Mateucci encontró la última pieza y la encajó un par de segundos antes que Pangal Andrade, convirtiéndose así en el triunfador. Para celebrar, pateó los tableros de sus compañeros y se burló del kayakista.

“Fue una prueba bastante difícil. Tragedia tiene Pangal que no puede creer que le gané. Me tocó por suerte, se me dio y estoy contento”, sostuvo el trasandino sobre su triunfo, y escogió a Pangal para tomar su lugar como Señor.

Andrade, por su parte, respondió sosteniendo que Mateucci “está con suerte. Llevamos ocho competencias, y que alguna vez gane, lo felicito“. Adempas, advirtió a su rival diciéndole que “si gano te voy a mandar todo el reality para el otro equipo, todo el reality a servir”.

Por otro lado, el último en completar la prueba fue Facundo, quien no logró encontrar las piezas correctas y se convirtió en el segundo nominado de la semana tras Pamela Díaz.

Notas relacionadas











Vuélveme a querer

Vuélveme a querer

El extraño caso de Cristian Castro es, finalmente, el de un artista que perdió el centro, vagó por los bordes y regresó sin pedir permiso. No volvió a través de un hit nuevo ni de una estrategia de marketing: lo hizo mediante algo más simple y más raro -una autenticidad torpe, luminosa e irresistible, respaldada por una carrera que, vista desde hoy, nunca dejó de importar.

Foto del Columnista Mauricio Jürgensen Mauricio Jürgensen