Los participantes en la conferencia sobre la recuperación económica de Ucrania, celebrada en Roma, Italia, se han comprometido a aportar más de 10.000 millones de euros para ayudar al país devastado por la guerra. La cumbre, a la que asisten líderes políticos europeos junto al presidente ucraniano Volodimir Zelensky, se celebra en un el marco de nuevos ataques con drones y misiles contra Kiev.
La conferencia que acoge la capital italiana es la cuarta de este tipo desde que Rusia invadió su país vecino en febrero de 2022, siendo su principal objetivo movilizar el apoyo internacional. Del monto total, la Comisión Europea detalló que apoyará al país presidido por Zelensky con 2.300 millones de euros para ayudarlo a reconstruirse.
“Con los 2.300 millones de euros en acuerdos firmados, pretendemos desbloquear hasta 10.000 millones de euros en inversiones para reconstruir hogares, reabrir hospitales, reactivar empresas y asegurar la energía”, dijo Úrsula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea.
Negociaciones de Rusia y Estados Unidos
Paralelamente a esta reunión, los jefes de diplomacia de Estados Unidos y Rusia se reunieron en Malasia para abrir el diálogo sobre nuevas ideas para las conversaciones de paz. En dicha reunión estuvieron presentes el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguei Lavrov.
“Creo que es un enfoque nuevo y diferente. No lo describiría como algo que garantice la paz, pero es un concepto que, ya saben, le transmitiré al presidente”, dijo Rubio a los periodistas presentes tras el término de las conversaciones. “Necesitamos ver una hoja de ruta que nos permita avanzar hacia la resolución de este conflicto. Y luego compartimos algunas ideas sobre cómo podría ser“.
No obstante, Rubio añadió que el presidente Donald Trump se ha sentido “decepcionado y frustrado por la falta de flexibilidad por parte de Rusia” para poner fin a la guerra.
La reunión se da luego de que el país norteamericano reanudara envíos de armas defensivas a Ucrania luego de una breve pausa. Las constantes críticas que ha comenzado a realizar el mandatario estadounidense ante el líder del Kremlin abren también una posibilidad de aplicar sanciones adicionales a Rusia.