Estados Unidos realizó la semana pasada un ataque con drones de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en contra de un puerto en Venezuela. Con esta acción, que no asesinó a nadie, se concretó la primera operación estadounidense conocida dentro del país, de acuerdo a lo informado por el New York Times.
De acuerdo al diario, el ataque tuvo como objetivo un muelle que funcionarios estadounidenses creen que era utilizado por la banda trasnacional Tren de Aragua para almacenar narcóticos y preparar su traslado en embarcaciones. Al momento de la ofensiva, según fuentes consultadas por el Times, no habían personas en el lugar, lo que permitió no registrar víctimas mortales.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó que, con los drones de la CIA, Estados Unidos fue el autor del ataque en el puerto de Venezuela. Sin embargo y cómo ha sido parte de su estrategia comunicacional, se negó a entregar detalles sobre cómo se ejecutó o quienes eran los encargados de llevarlo a cabo.
El Gobierno venezolano no comentó directamente la operación, al mismo tiempo que el ministro del Interior, Diosdado Cabello, denunció una serie de acciones de “acoso, amenazas y ataques“.
El ataque con drones en puerto de Venezuela
Según el New York Times, la operación marca una intensificación de la campaña de presión de la Administración Trump contra el Gobierno de Maduro, que hasta el momento se había limitado a acciones en aguas internacionales contra embarcaciones sospechosas de narcotráfico. En la región, el pentágono desplegó drones MQ-9 Reaper como parte de la estrategia, según el periódico.
Desde hace algunas semanas, Trump ha advertido que Washington iba a comenzar a atacar objetivos en tierra, luego de la destrucción de una treintena de lanchas que presuntamente transportan droga y la muerte de más de 100 de sus ocupantes. Estados Unidos asegura que las acciones se enmarcan en su lucha contra el narcotráfico, mientras que Caracas lo ve como “amenazas” y un intento de propiciar un cambio de régimen.
Las tensiones escalaron luego del anuncio del mandatario estadounidense de un bloqueo a los buques petroleros sancionados que se trasladen desde y hacia el país sudamericano, y la confiscación de dos buques que transportaban crudo venezolano en las últimas semanas.