Violencia de género en línea contra lideresas indígenas en Chile
La lucha de las lideresas indígenas es una lucha por el equilibrio no solo de sus comunidades, sino del mundo entero. En ellas radica la posibilidad de un futuro más justo y en armonía con la naturaleza. Su protección es una tarea colectiva y urgente.

La violencia de género en línea contra lideresas indígenas no es un fenómeno aislado, sino una manifestación contemporánea de estructuras coloniales, patriarcales y racistas profundamente enraizadas en nuestra sociedad. De acuerdo con el informe reciente de la Fundación Multitudes “La violencia de género en línea contra lideresas indígenas en Chile”, el 94% de las mujeres indígenas han sido víctimas de desinformación, afectando directamente su vida diaria, su capacidad de liderazgo y el ejercicio de sus derechos. Además, el 72% considera que estas campañas han impactado sus vidas, mientras que el 66% afirma que han influido en su decisión de participar en la vida pública. Reflexionar sobre este tema desde múltiples miradas, descolonial, feminista y del Azmapu, nos permite comprender las causas profundas de esta problemática y las posibles vías para enfrentarla.
La violencia de género en línea contra lideresas indígenas es una herramienta de poder colonial que perpetúa la subordinación de los pueblos originarios. Históricamente, el colonialismo no solo despojó a los pueblos indígenas de sus territorios, sino que también construyó narrativas que deslegitiman sus conocimientos y liderazgos. La desinformación dirigida hacia lideresas indígenas refuerza estereotipos racistas, despojándolas de credibilidad y autoridad en los espacios públicos; estas campañas no son accidentales; responden a un sistema que busca mantener el control sobre los cuerpos y territorios indígenas; al atacar a las lideresas, también se busca debilitar los movimientos sociales que ellas lideran, desafiando las estructuras hegemónicas, la lucha por la justicia, la autodeterminación y la defensa de los derechos colectivos.
Del mismo modo, la violencia de género en línea es un ejemplo claro de cómo se entrecruzan las opresiones de género, etnia y clase. Las mujeres indígenas enfrentan una doble marginalización: como mujeres dentro de sistemas patriarcales y como indígenas en un sistema colonial. La desinformación, los ataques y los discursos de odio buscan deshumanizarlas, debilitarlas emocional y psicológicamente, y silenciarlas como lideresas. En este sentido, la desinformación no solo busca desacreditarlas, sino también desalentar su participación pública, como lo demuestra el 66% de las encuestadas que afirmaron haber reconsiderado su participación en la vida pública.
El Azmapu, como principio filosófico, enfatiza la interconexión de todos los seres y la necesidad de relaciones basadas en el respeto mutuo y el equilibrio. La violencia de género y todas son rupturas directas de estos principios, ya que destruye las relaciones de reciprocidad y cuidado que sostienen las comunidades. Además, al atacar a las lideresas, estas prácticas erosionan los sistemas comunitarios que son esenciales para la resistencia y la continuidad cultural. Las mujeres ocupan un lugar fundamental en la mantención del equilibrio y son defensoras de la vida en todas sus formas. Atacar a las lideresas indígenas no solo es un ataque personal, sino también un intento de desarticular las redes comunitarias que ellas representan y fortalecen.
Frente a esta situación, es urgente abordar la violencia de género en línea desde una perspectiva transformadora. En primer lugar, las mujeres indígenas que enfrentan violencia en redes sociales, necesitan mensajes de apoyo, empoderamiento y herramientas concretas para enfrentar esta problemática, entre ellos, decir:
- Tu liderazgo y tus palabras son una fuerza transformadora.
- Toma medidas para cuidar tu presencia en línea: configura la privacidad de tus perfiles. Documenta y denuncia los ataques recibidos. Guarda capturas de pantalla y evidencias.
- Busca apoyo en tus redes comunitarias, organizaciones indígenas , colectivos y feministas que puedan brindarte acompañamiento emocional y legal.
- El Azmapu y la sabiduría de tu pueblo, familia y comunidad son una fuente de fortaleza. Desde ellas, puedes encontrar herramientas para sanar y resistir. Reconoce que tu conexión con el territorio, tu comunidad y los valores ancestrales son un pilar para enfrentar esta violencia y construir un futuro distinto.
- Recuerdas: mereces un espacio donde ser escuchada, respetada y valorada. La violencia que enfrentas es una muestra de la importancia de tu voz y del cambio que representas. Esta violencia no es culpa tuya y tampoco estás sola en esta resistencia, hay muchas mujeres y comunidades que te respaldan y también cuentas con la memoria de tus antepasados que acompañan todo tu caminar.
La lucha de las lideresas indígenas es una lucha por el equilibrio no solo de sus comunidades, sino del mundo entero. En ellas radica la posibilidad de un futuro más justo y en armonía con la naturaleza. Su protección es una tarea colectiva y urgente.