Hasta la Corte Suprema llegó la defensa de Mauricio Ortega para buscar la nulidad del juicio que lo encontró culpable de la brutal agresión sufrida por Nabila Rifo, donde la mujer resultó ciega luego que le sacara los ojos.
Es por ello que el defensor Ricardo Flores utilizó un argumento bien poco ortodoxo para intentar que se deje sin efecto la condena de 26 años de cárcel por lesiones graves gravísimas, femicidio frustrado y violación de morada.
Esto, ya que según Flores “habría salido, desde el punto de vista legal, más barato haberla matado que simplemente haberla dejado viva”, agregando, según radio ADN, que no hubo femicidio frustrado, sino solo una conducta violenta en la pareja.