En medio de la discusión de la despenalización del aborto en tres causales, en su faceta de comentarista, el cantautor nacional Alberto Plaza puso en duda las palabras de la mujer y de los equipos médicos para calificar una violación.
A través de una carta publicada en El Mercurio, el artista expone que “en el caso de las causales de ‘riesgo de vida de la madre’ e ‘inviabilidad del feto’, lo que se intenta proteger en ambos casos es la vida, lo que es bueno, pero la falta de métodos que garanticen un cien por ciento de precisión en los diagnósticos debería ser razón suficiente para no correr el riesgo de cometer errores que son irreversibles. El caso de ‘violación’ es más complejo aún. Si bien es cierto que la realidad de una mujer violada es indescriptiblemente horrorosa, la despenalización por esta causal no va en la dirección de la vida, sino de la muerte. Uno de los dos va a morir, y será precisamente aquel que no puede defenderse”.
Según su apreciación, “el proyecto de ley carece de rigurosidad para establecer la forma de probar la existencia de una violación. Solo dice que ‘un equipo de salud, especialmente conformado para estos efectos, evaluará e informará la concurrencia de los hechos que la constituyen’. La falta de precisión en este punto abrirá la puerta a que muchas mujeres que queden embarazadas sin ser forzadas, vayan a hacerse un aborto argumentando que lo fueron. Imposible demostrar lo contrario“.
“En ese caso, la única prueba sería la palabra de la mujer, lo que parece insuficiente. La causal de violación es tremendamente delicada. Por un lado está la estabilidad psicológica de la mujer, y por el otro está la vida misma de su hijo o hija. ¿Qué vale más? Yo creo que la vida”, concluye Plaza.
