Gustavo Gatica retomó la bicicleta y estuvo en el atropello de la Alameda: “Sentí cerca los caballos”
El joven, uno de los íconos del denominado estallido social, relató su experiencia en la manifestación marcada por la violencia a una semana del Plebiscito de Salida.
Por Luis Rivera
Gustavo Gatica retrató en sus redes sociales cómo sintió la carreta que atropelló a varios ciclistas en la Alameda cuando se cruzaron las caravanas del Apruebo y el Rechazo AGENCIA UNO/ARCHIVO
Gustavo Gatica Villarroel se volvió uno de los íconos del denominado estallido social luego de hacerse conocido públicamente al recibir la agresión balística de parte del cabo Claudio Crespo en una manifestación. El psicólogo de 26 años perdió la vista tras recibir dos disparos en la calle Carabineros de Chile, en el centro de Santiago, el 8 de noviembre de 2019, en pleno desarrollo de las manifestaciones sociales que marcaron esos días.
Tras esos hechos y sus posteriores consecuencias, Gatica se mantiene en las calles manifestándose y en la actualidad lo hace en favor de la opción Apruebo con miras al Plebiscito de Salida que se desarrollará el próximo 4 de septiembre.
Este domingo, el profesional volvió a la actividad pública tras estar presente en la Alameda en el cruce de marchas que se produjo entre adherentes de ambas opciones, instancia en la que se generó una pelea con agresiones, atropello, golpes e insultos de lado y lado.
El relato de lo vivido por Gustavo Gatica
Gustavo Gatica compartió este lunes un registro de una cámara que portaba durante la marcha, dando cuenta de su presencia en la manifestación a través de las redes sociales, plataforma que utilizó igualmente para relatar su experiencia.
“Luego de tres años volví a subirme a una bicicleta para participar de la cicletada por el Apruebo”, narró. “Fue algo muy significativo para mí y, por lo mismo, decidí dejar registro de todo el trayecto”, escribió al momento de compartir un video donde se aprecian los momentos posteriores al atropello de la carreta en contra de unos manifestantes, cuando el carruaje arranca por la Alameda hacia el poniente perseguida por varios ciclistas.
“Cuando íbamos a la altura de Universidad Católica sentimos que una carreta venía a toda velocidad por nuestra espalda. En ese momento, todos gritaron que había que correrse”, enfatizó.
“Sentí muy cerca el galope de los caballos. Un par de segundos después nos enteramos de que había atropellado a unos ciclistas”, contó. “Es incomprensible este actuar irresponsable, considerando que había menores de edad y personas como yo, con discapacidad. Por suerte esta vez, nadie resultó herido de gravedad”, sentenció.
