Los peritos que indagan el choque entre un jeep y un bus de pasajeros que le costó la vida a una familia completa en el puente Llacolén, en la Región del Biobío, investigan la posibilidad de que el hecho no haya correspondido a un hecho accidental.
El accidente ocurrió la noche del martes en el mencionado puente, que une las comunas de Concepción y San Pedro de la Paz, en la Región del Biobío, cuando el vehículo menor impactó de frente al bus, provocando la muerte instantánea de la familia que se trasladaba en el jeep, y dejando once heridos en el bus, entre ellos el conductor de la máquina.
De acuerdo con lo detallado por Carabineros, las víctimas fatales corresponden a un matrimonio de 39 y 38 años, respectivamente, a su hija de diez años y su hijo de cinco.
La hipótesis del choque en el Biobío
Según las primeras informaciones emanadas desde la Región del Biobío tras el choque, las indagatorias iniciales apuntan a la hipótesis de una posible acción intencional y deliverada, del tipo kamikaze. Es decir, de la decisión consciente del conductor de estrellar el vehículo contra el bus de pasajeros.
Lo anterior, luego de que el trabajo de los peritos no detectara en el lugar alguna huella que diera cuenta de un frenado de emergencia en el lugar.
