Secciones
País

Las tres comunas de la Región Metropolitana con clases suspendidas y por qué

En dos de ellas todos los establecimientos no tienen clases, mientras que en la tercera solo dos adoptaron la medida.

Durante la jornada de este martes 6 de mayo, tres comunas de la Región Metropolitana tienen sus clases suspendidas a raíz de una emergencia y una Alerta Amarilla por parte del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred).

Esta situación se debe a un incendio forestal en el sector de Santa Filomena en Melipilla, el cual ya ha afectado a 800 hectáreas y aún es combatido por parte de funcionarios de diversos organismos de emergencia.

Hasta el lugar ya han llegado funcionarios del Cuerpo de Bomberos de María Pinto, Melipilla e Isla de Maipo y un equipo técnico y dos brigadas de la Conaf.

Aún así, esperan que debido a las condiciones meteorológicas, las llamas logren disminuir su intensidad y, además, destacaron que no existen, hasta el momento, amenazas a estructuras.

Comunas de la Región Metropolitana con clases suspendidas

Para esta jornada, las tres comunas de la Región Metropolitana por las que se optó suspender sus clases son:

  • Melipilla (Liceo Bollenar y Jardín Infantil Las Travesuras)
  • Curacaví (todos los establecimientos).
  • María Pinto (todos los establecimientos).

La decisión se tomó principalmente por la cantidad de humo que ha generado el incendio forestal y que ha afectado estos establecimientos. Por lo mismo, y con tal de no afectar la salud de los escolares, es que se adoptó la medida en coordinación con la Seremi de Educación.

Notas relacionadas







La envidia del barrio

La envidia del barrio

Defender el saludo, el reconocimiento y el traspaso ordenado no es defender a un gobierno ni a una coalición. Es defender una idea de país donde el poder es transitorio, las instituciones permanentes y la democracia algo más que un resultado electoral. Tal vez por eso, en medio de un vecindario convulsionado, Chile sigue siendo —cuando honra estas prácticas— la envidia del barrio.

Foto del Columnista Julio Sánchez Julio Sánchez