Las lluvias registradas en el norte del país han llamado la atención por su carácter inusual, ya que estas zonas son justamente conocidas por su clima seco y cielos despejados durante gran parte del año.
Esta semana la Región de Atacama ha enfrentado un complejo panorama climático debido a dos sistemas frontales y un núcleo frío en altura que han dejado lluvias, viento y posibles tormentas eléctricas.
Ante esta situación, la Dirección Meteorológica de Chile (DMC) emitió ocho alertas y, como medida preventiva, la comuna de Huasco suspendió las clases en todos sus establecimientos, incluyendo jardines, escuelas y liceos de Vallenar, Alto del Carmen, Huasco y Freirina.
En tanto, el director regional de Senapred Atacama, Roberto Muñoz, detalló que las lluvias se han concentrado en el litoral sur, especialmente en sectores como Caleta Chañaral de Aceituno, Carrizalillo y Puerto de Huasco, donde se alcanzaron hasta 18 milímetros de agua caída. En el interior, localidades como Freirina, Domeyko e Incahuasi acumularon hasta 10 milímetros, siendo Vallenar la más afectada.
Asimismo, en la provincia de Copiapó, Totoral registró 14 milímetros, mientras que en Caldera cayeron siete. También se reportaron lluvias intermitentes en Copiapó y Tierra Amarilla, y precipitaciones en la comuna de Chañaral y sus balnearios, además de ráfagas de viento en El Salado.
Desde el Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (CEAZA), emitieron una alerta de precipitaciones de lluvia y nieve entre los días jueves 21 y viernes 22 de agosto en la Región de Coquimbo.
“El sistema frontal ingresará con mayor fuerza por la costa del Choapa cerca de las 18:00 horas, avanzando posteriormente al Limarí alrededor de las 22:00 horas y al Elqui cerca de las 03:00 horas del viernes 22, extendiéndose progresivamente hacia los valles interiores en todas las provincias”, alertó Tomás Caballero, meteorólogo del CEAZA.
“No es común tener este tipo de precipitaciones”
En conversación con EL DÍNAMO, Arnaldo Zúñiga, meteorólogo de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), explicó las razones de este inusitado clima en el norte del país.
“La verdad es que no es común tener este tipo de precipitaciones en la Región interior de Coquimbo, principalmente en Vicuña. En los sectores altos de la pericordillera, sobre la cota de los 700 o 900 metros, existe una altísima probabilidad de que tengamos estas precipitaciones de nieve, producto del paso del sistema frontal”, señaló el experto.
“Entonces, como especialmente Vicuña está muy cerca de la cota del isoterma cero, está altísima la probabilidad de que las precipitaciones sean de nieve, sobre todo, como decía anteriormente, en la madrugada y mañana del día viernes”, afirmó.
Junto a ello, aclaró que “la masa de aire, en este caso, es muy similar a lo que ocurrió en el 2017, donde también gran parte de los valles de la zona central y también del sector alto de la Región de Coquimbo se generaron precipitaciones de nieve. Entonces, sí existe esta alta probabilidad de que el fenómeno se produzca”.
De acuerdo a la información entregada por el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), las intensas lluvias y nevadas pueden afectar de forma significativa a las regiones de Coquimbo y Atacama, especialmente porque son zonas poco habituadas a este tipo de fenómenos climáticos.
Si bien pueden traer beneficios al aliviar la sequía, favorecer la agricultura y aportar al sistema hídrico mediante la acumulación de nieve en la cordillera, también generan riesgos importantes como aluviones, crecidas de quebradas, cortes de energía, interrupciones en el tránsito y daños a la infraestructura, debido a que muchas localidades no cuentan con sistemas de drenaje preparados para lluvias intensas.