Desde este viernes comenzó a regir la Ley N° 21.778, normativa que establece que los colegios deberán asegurar al menos 60 minutos diarios de actividad física dentro de sus recintos. La medida, que no reemplaza la asignatura de Educación Física, busca fomentar hábitos de vida saludable desde la infancia y fortalecer la prevención de enfermedades asociadas al sedentarismo.
Para marcar la entrada en vigencia de esta ley, autoridades de los ministerios de Salud, Educación y Deporte visitaron la Escuela Especial Andalué, en Maipú, donde participaron en actividades recreativas junto a estudiantes.
Allí, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, destacó el impacto que tendrá esta política pública en el bienestar social. Según afirmó, “esta ley nos ayuda porque la salud y el bienestar no se construyen solo con los médicos, sino en las condiciones en que nacemos, nos desarrollamos en la familia, nos educamos y en los ambientes de trabajo“.
El avance legislativo fue especialmente significativo considerando que la iniciativa estuvo 14 años en tramitación y pasó los últimos siete en el Senado. Finalmente, en noviembre obtuvo respaldo transversal: 22 votos a favor, ninguno en contra y dos abstenciones.
En la ceremonia también participó el senador Francisco Chahuán, impulsor de la moción original, quien valoró la voluntad política que permitió destrabar el proyecto. “Hubo muchas excusas antes de lograr finalmente aprobar la ley. Este gobierno priorizó la iniciativa y logró que se convirtiera en realidad“, señaló.
Cómo se implementarán los 60 minutos de actividad física en colegios
La implementación será progresiva. A partir de 2027, todos los colegios deberán asegurar el tiempo mínimo de actividad física, comenzando por educación parvularia hasta cuarto básico. En 2028, la obligación se ampliará desde quinto básico hasta cuarto medio.
Para el nivel parvulario, los minutos podrán destinarse a juegos activos, mientras que en básica y media deberán corresponder estrictamente a ejercicio físico.
El ministro del Deporte, Jaime Pizarro, subrayó que la medida contribuirá a “desincentivar las conductas sedentarias y el tiempo excesivo en pantallas, factores de riesgo para nuestros niños y niñas“. Con esta ley, Chile se alinea con países como Finlandia, Francia y China, que ya cuentan con políticas similares recomendadas por la Organización Mundial de la Salud.