El presidente de la Federación Regionalista Verde Social (FRVS), Jaime Mulet, abordó la salida de Esteban Valenzuela del Ministerio de Agricultura, decisión que se tomó luego de que la colectividad decidiera ir por una lista parlamentaria propia, provocando un quiebre en el oficialismo.
En conversación con CNN Chile, el diputado aseguró que no se ha roto la unidad tras llevar dos listas parlamentarias en las próximas elecciones. “El presidente de la República es líder de la coalición, yo reconozco eso, pero no nos puede dar instrucciones si somos partidos políticos. Y es un acto propio de los partidos determinar cómo te conformas, qué candidatos llevas”, criticó.
Aún así reconoció que la salida de Valenzuela “fue un golpe fuerte para el partido”, indicó que si al presidente Boric “le desagradó que no le hiciéramos caso en una decisión de partido. Si quiere que le hagamos caso, está equivocado”.
“Si nosotros dejamos que el presidente nos dé las órdenes a los partidos, bueno, vámonos a un régimen de partidos únicos. Esto no es China, esto no es Cuba, esto es Chile. Los partidos políticos tienen autonomía“, remarcó.
Por otro lado, Jaime Mulet acusó que dos militantes del FRVS han recibido presiones del Gobierno a renunciar a sus cargos públicos si no deponen sus candidaturas.
Según denunció, “me llamó un señor que es un funcionario a honorarios de un Ministerio en la Región de Biobío, que si no declina su candidatura lo van a echar“. A eso sumó que “una funcionaria de la Región Metropolitana, que también es candidata, una trabajadora profesional, contrata de un servicio público, que si no renuncia y no llega con un papel hoy día sobre que desiste su candidatura, la van a echar. O sea, actitudes propias de la dictadura”.
Si bien el diputado no quiso entregar quiénes estarían amenazando a los militantes del partido, aseveró que se trata de “funcionarios intermedios, jefaturas intermedias”.