En relativa calma se había desarrollado la campaña de segunda vuelta de José Antonio Kast. La holgada ventaja que mostraban las encuestas antes de la veda y el rápido respaldo que obtuvo de las diferentes fuerzas de la oposición dieron una sensación de estabilidad a la campaña del republicano tras la primera vuelta.
Pero esta semana el panorama cambió.
El desempeño del abanderado republicano en el debate ARCHI no dejó contentos a todos en Chile Vamos, coalición que ha apoyado a Kast en el despliegue regional, pero que no ha tenido mayor injerencia en el diseño estratégico de la campaña.
Las críticas —que se han expresado en la interna de la coalición— tienen que ver con lo poco claro que ha sido Kast para explicar algunas de sus propuestas. Tal es el caso del plan de expulsiones que comprometió el candidato en su programa.
A la fecha, el fundador de Republicanos no ha logrado explicar de qué forma hará efectiva las más de 330 mil expulsiones que comprometió. En cambio, ha esbozado ideas como que “invitará” a salir a inmigrantes que entraron de manera irregular o que ellos mismos (o quiénes los contraten) deberán pagar su viaje de regreso al país de origen.
El diputado Diego Schalper (RN) aseguró que es necesario “precisar” la manera en que se van a llevar a cabo estas propuestas indicando que “este tipo de temas son los que hay que bajar al área chica” si es que Kast es electo.
La réplica desde el entorno de Kast llegó con fuerza. El arquitecto y encargado de desarrollar el plan habitacional de un eventual gobierno republicano, Iván Poduje, arremetió contra Schalper en redes sociales acusándolo de asociarse con la izquierda.
“Ni con cupo protegido en el D11 puede evitar aliarse con la izquierda”, fue el comentario del integrante del comando de Kast en X (antes Twitter).
En Chile Vamos irritó el tono del mensaje de Poduje (que luego borró) y causó el primer signo de inestabilidad en la alianza puesto que el arquitecto es quién asoma como eventual ministro de Vivienda de Kast. “Si ese va a ser el estilo de los republicanos, va a ser difícil pensar en una coalición”, dice una voz de RN.
El senador Luciano Cruz-Coke salió en defensa de Schalper y apuntó contra el arquitecto: “Espero que Poduje, que durante meses se ha dedicado a atacar a cuánto militante Evópoli, RN o UDI, se le cruza, comprenda que no puede vivir denostando a quienes considera sus adversarios”.
El caso del diputado Meza
Otro flanco que se abrió en la campaña fue la apertura del diputado republicano, José Carlos Meza, a otorgar indultos a enfermos terminales, incluidos condenados por delitos de abuso infantil.
La declaración del legislador causó molestia en Chile Vamos, además que fue evaluada como “poco estratégica” tomando en consideración lo poco que queda para la elección y que el martes es el debate Anatel.
La diputada Marlene Pérez (UDI) pidió al Partido Republicano aclarar la situación señalando que “cualquier proyecto o indulto que apunte a conmutar las penas de los reos de mayor edad debe hacerse de manera criteriosa y en ningún caso puede abordar todos los delitos sin hacer una mínima distinción. Yo quiero pensar que acá hubo un error involuntario en la declaración y espero que desde el Partido Republicano puedan corregir esta afirmación”.
En la coalición de centro derecha, además, apuntan a que esta es la segunda vez que Meza abre un flanco. Hace algunas semanas, el diputado republicano cuestionó la efectividad de las 40 horas, declaración que fue viralizada en redes sociales y posteriormente ocupada por Jeannette Jara para emplazar al abanderado.
Kast abordó la polémica, pero evitó aclarar si los dichos de Meza son o no una postura de partido.
“Aquí, de nuevo, se hace todo un hecho político por los dichos de José Carlos Meza (…) enfoquémonos en lo que tenemos que hacer: cuidar nuestras instituciones, cuidar a gendarmería, enfrentar a los delincuentes”, se limitó a decir el abanderado republicano.