
La Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y la Asociación de Bancos (Abif) celebraron ayer la aprobación del proyecto de ley —por amplia mayoría en el Congreso— que permitirá un subsidio automático a la tasa de interés de los créditos hipotecarios de hasta 4.000 UF.
El mercado de adquisición de casas y departamentos de hasta $157 millones (su equivalente en pesos) es uno de los más ralentizados del sector inmobiliario.
Se trata de un segmento de mercado de la clase media que no logra acceder a créditos hipotecarios para adquirir estas unidades, que son las más abundantes en la oferta actual.
¿Dónde se encuentran estas viviendas?
Según la CChC, en el caso de las casas, las comunas donde se pueden encontrar propiedades dentro de estos valores son: San Bernardo y Buin (807 unidades); Lampa, Quilicura y Renca (648 unidades); Padre Hurtado, Peñaflor y Talagante (207 unidades); Puente Alto (76 unidades); Maipú, Pudahuel y Cerrillos (67 unidades).
En cuanto a los departamentos, la oferta más abundante está en Santiago, comuna que totaliza 9.545 unidades en oferta. Le siguen La Florida con 6.300 viviendas; Puente Alto, San Joaquín, La Granja y Buin con 6.108; y Ñuñoa con 4.657 unidades, siendo estos los sectores con mayor disponibilidad en ese rango de precios.
De acuerdo con los datos proporcionados por la Cámara Chilena de la Construcción, todas estas son propiedades nuevas a diciembre de 2024.
A nivel nacional, en tanto, en la zona norte se contabilizan poco más de 7.000 departamentos y 941 casas, mientras que en el sur del país existe una disponibilidad de 11.232 departamentos y 1.915 casas.
¿Cómo funcionará el subsidio a la tasa de interés de los créditos hipotecarios?
El subsidio a la tasa de interés de los créditos hipotecarios podría alcanzar hasta 50.000 personas y regirá retroactivamente para promesas de compraventa firmadas desde el 1 de enero de 2025. De este total, 6.000 subsidios estarán destinados a viviendas sociales de hasta 3.000 UF, enmarcadas en el Programa de Emergencia Habitacional del gobierno.
El beneficio se aplicará directamente a la tasa de interés ofrecida por los bancos a los solicitantes, creando un sistema de apoyo directo que reducirá el dividendo final a pagar.
“Establece un subsidio de hasta 60 puntos base sobre la tasa de interés de los créditos hipotecarios, junto con una garantía estatal equivalente al 60% del valor de la vivienda por la mitad del plazo del crédito“, explicó el gerente general de la Abif, Luis Opazo.
En términos prácticos, agregó el representante de los bancos, esto se traduce en que, si la tasa de interés de un crédito es de 4,5%, “con este programa esta podría bajar a 3,9%”. Es decir, para una operación con un 20% de pie a 20 años, implicaría una reducción del 5% en el dividendo.
Ahora restan las formalidades de la nueva ley: su publicación en el Diario Oficial y la definición de los reglamentos necesarios para comenzar a otorgar el beneficio.