
Los bautizados malls chinos han estado en la mira por los incumplimientos a diferentes regulaciones en distintas comunas como Ñuñoa y Providencia. De allí que diversas fiscalizaciones han terminado con la clausura de estos locales.
Las más llamativas, el cierre por razones laborales del Lida en Providencia y otra sede de la misma cadena en Ñuñoa que se sumaron a cierres en Santiago Centro.
Si bien Super Lida, el mall chino más grande de Chile y que fue clausurada por la Dirección del Trabajo, logró su reapertura bastante rápido, el centro comercial de la misma cadena ubicado en Pedro de Valdivia, en la comuna de Ñuñoa, está pronto a su reapertura.
Clausurado por la administración que encabeza Sebastián Sichel, el local fue sindicado de no tener su patente comercial al día. Sin embargo, recientemente anunciaron en sus redes sociales: “Les tenemos muy buenas noticas. Nuestra tienda, dentro de muy poco tiempo, reabrirá sus puertas“.
En la misma zona, también había sido clausurado por razones de patente la sucursal de la cadena oriental Kassa, que oficializó que ya regularizó su situación y pudo volver a operar en Avenida Irarrázaval.
Estudio de la Odecu
Dentro de las críticas a este segmento comercial, la Organización de Usuarios y Consumidores (ODECU) difundió un estudio donde señaló que de acuerdo sus indagatorias “evidencian un entorno comercial con importantes zonas grises en el cumplimiento de las normas de protección al consumidor. Esta situación requiere de una respuesta institucional articulada que combine fiscalización efectiva, educación al consumidor y adecuación normativa para abordar los desafíos que plantea este fenómeno comercial en crecimiento”.
La organización dijo que presentaría sus antecedentes al Sernac para mayor supervisión de la autoridad.
En tanto, en marzo de este año la asociación Multigremial, presidida por Juan Pablo Swett, ofició a una serie de servicios por eventuales faltas de los malls chinos a la normativa local. Salud, Trabajo y en Instituto de Salud publica fueron algunos de los organismos alertados por el gremio.
Asimismo, la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) señaló que se debe resguardar que este tipo de comercios oculten actividades ilegales e informales.