El pasado 2 de agosto, en el marco del Mes de la Fotografía -cuyo día internacional es el 19 de agosto-, la fotógrafa chilena Andrea Manuschevich inauguró su primera exposición individual, Equilibrio: Niñas Gimnastas, en el Centro Cultural Las Condes.
La muestra estará abierta al público hasta el 31 de agosto y se presenta como una exploración visual y sonora de la vida de niñas que viven entre la pasión, la disciplina y la obsesión por la gimnasia artística.
A través de retratos realizados en sus espacios íntimos —sus dormitorios, los cuales ellas transforman en gimnasios improvisados para entrenar constantemente—, el proyecto refleja la tensión entre la infancia y la exigencia de un deporte que requiere alta concentración, rigor y disciplina. Así como también, desarrolla en las atletas una gran fortaleza tanto física como emocional, perseverancia y resiliencia.

Guiada por una profunda sensibilidad al color y un ojo refinado para la composición, Andrea Manuschevich retrata la belleza de los trajes y sus brillos, la perfección de los peinados y las formas que las niñas son capaces de armar con sus cuerpos, así como también la fragilidad de una etapa marcada por los cambios corporales y la búsqueda de la identidad.
“Me atrajo —y comparto con ellas— esa obsesión y pasión que surge cuando algo nos gusta… y nos gusta tanto, que no sale de nuestra cabeza”, comentó Andrea Manuschevich. “Así como también siento una profunda admiración por la confianza que tienen en ellas mismas y la actitud que tienen frente a sus miedos”, agrega la artista, quien a través de su lente, juega con el concepto de “equilibrio” no solo físico, sino que también emocional y simbólico, en un momento de la vida en que todo está en transformación y confusión, como lo es la etapa de la adolescencia.

La muestra incluye un relato sonoro que complementa las imágenes con las voces de las propias gimnastas, quienes exponen sus sentimientos frente a este deporte, como por ejemplo, lo que este les ha enseñado, cuáles son sus principales desafíos y quiénes son sus ídolas. Capa que profundiza la experiencia de la audiencia, permitiendo que conecte aún más con la sensibilidad, la determinación y el mundo interno de estas niñas.