
Estados Unidos y China firmaron este miércoles 25 de junio un acuerdo comercial tras una serie de negociaciones celebradas tanto en Pekín como en Londres.
Primero fue Donald Trump quien hizo el anuncio en la Casa Blanca, señalando que “firmamos (el acuerdo) con China ayer (miércoles). Lo acabamos de firmar“. En las últimas horas se sumó el Ministerio de Comercio chino el que en un comunicado, indicaron que “tras las negociaciones en Londres, los equipos de China y Estados Unidos mantuvieron una comunicación cercana. Recientemente, con aprobación, ambas partes confirmaron los detalles del acuerdo“.
En el mismo documento consignaron que “China revisará y aprobará las solicitudes de exportación de bienes controlados que cumplan con las condiciones con arreglo a la ley“. En tanto, “Estados Unidos cancelará una serie de medidas restrictivas que tomó contra China“.
“Se espera que Estados Unidos y China encuentren un término medio y cumplan con los importantes consensos y requisitos alcanzados por los jefes de Estado el pasado 5 de junio”, agregaron.
El secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, aseveró en Bloomberg TV que en este acuerdo comercial con China se ultimaron los temas que abordaron en mayo, durante las primeras negociaciones celebradas en Ginebra.
El factor tierras raras
Si bien no se han entregados mayores detalles del acuerdo comercial entre Estados Unidos y China, se ha aseverado que un factor importante en él fueron las denominadas tierras raras.
Al respecto, el país norteamericano buscaba restablecer el ritmo de los envíos de estos metales estratégicos, que la Casa Blanca considera actualmente demasiado bajo, ya que son cruciales para baterías eléctricas, turbinas eólicas y sistemas de defensa (misiles, radares, satélites).
En Pekín, en tanto, para ellos, uno de los puntos claves es que Washington reconsiderara algunos controles a la exportación de productos, en particular los tecnológicos.