El presidente de Colombia, Gustavo Petro, extendió una invitación pública a la líder opositora venezolana María Corina Machado para visitar su país y sostener un diálogo directo sobre la “paz del Caribe y no de invasiones”. El llamado se produjo luego de que Machado abandonara Oslo, donde permaneció durante una semana tras recibir el Premio Nobel de la Paz.
A través de su cuenta de X, el mandatario colombiano planteó la necesidad de replantear las relaciones hemisféricas. “Estados Unidos y América Latina deben rehacer su pacto de convivencia sobre la base de la soberanía y la autodeterminación de los pueblos“, escribió Petro. “Por eso la señora Corina, que invito a venir físicamente a Colombia a dictar su conferencia libremente (…) y hablar conmigo de la paz del Caribe y no de invasiones”.
Hasta el momento, Machado no ha respondido públicamente a la invitación del jefe de Estado colombiano. Sin embargo, su salida de la capital noruega fue confirmada por el primer ministro de ese país, Jonas Gahr Store, en declaraciones a la agencia de noticias Bloomberg, luego de la intensa agenda que mantuvo en Oslo por la entrega del Nobel.
Más allá de la invitación a Machado: la respuesta de Petro a Trump
En el mismo mensaje, Petro abordó la reciente polémica con Estados Unidos tras declaraciones del presidente Donald Trump, quien amenazó con aumentar las presiones sobre Caracas si no entrega “de inmediato” el petróleo que, según su visión, “le ha sido robado”. Frente a ello, el mandatario colombiano afirmó que “sustentar medidas soberanas sobre la propiedad de la Nación no es robo“.
Petro explicó que existe una diferencia estructural entre ambos sistemas jurídicos: “En Estados Unidos el propietario del subsuelo es el propietario del suelo, (mientras que) en América Latina el propietario del subsuelo es la nación por orden Constitucional”.
A su juicio, se trata de “una falta de entendimiento total de legislaciones diferentes que deben ser respetadas porque fueron respaldadas electoralmente por los pueblos soberanos”.
Finalmente, el presidente colombiano ejemplificó su argumento al señalar que, “de una manera similar, México podría reclamar a (Estados Unidos) Texas, California, La Florida y Nuevo México, porque hacían parte del territorio mexicano y fueron tomadas a la fuerza”.