El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó retomar las medidas de confinamiento y decretó una semana de “cuarentena radical” para evitar el aumento de contagios de coronavirus en Venezuela.
“¡Todos a prepararnos para siete días de cuarentena verdaderamente radical!”, señaló el mandatario en medio de una cadena nacional que reportó el fallecimiento de 6 personas y 922 nuevos casos.
El confinamiento es “necesario”, dijo Maduro. “Debemos seguir batallando duro contra el virus y cortar las cadenas de contagio”, agregó.
Según la explicación de Nicolás Maduro, la “cuarentena radical” se enmarca dentro de un esquema de confinamiento llamado “7+7” que está vigente desde junio y que alterna siete días de cuarentena, donde el comercio es obligado a cerrar salvo el rubro de alimentos y salud, con siete de “flexibilización” que permiten reactivar el resto de las actividades.
Hasta la fecha, Venezuela registra un total de 45.868 casos confirmados de coronavirus y 381 personas muertas desde el inicio de la pandemia, según cifras oficiales.
Sin embargo, el balance oficial entregado por Maduro ha sido cuestionado por la oposición y organizaciones como Human Rights Watch por considerar que la situación es mucho peor en el país habitando por más de 33 millones de personas.
Paralelamente, Maduro indicó que Venezuela participará en la fase 3 para el desarrollo de la vacuna Sputnik V contra el coronavirus que fue desarrollada en Rusia.
“Venezuela se incorpora a la vacuna rusa, en los próximos días pediremos los voluntarios que hacen falta para ponerse la vacuna y participar por Venezuela en la fase 3 del Sputnik V”, dijo Maduro.
La decisión, según el mandatario, fue tomada tras una “reunión importante” entre el ministro de Salud venezolano, Carlos Alvarado, y “la comisión de científicos rusos que está llevando adelante la vacuna”.
