
La municipalidad de Santiago pedirá reducir su aporte al Fondo Común Municipal, luego que el Servicio de Impuestos Internos anunciara una rebaja de hasta el 50% a las contribuciones para los locales comerciales del Casco Histórico.
El alcalde Mario Desbordes aclaró que “el anuncio del director del Servicio de Impuestos Internos de rebajar las contribuciones en algunos locales comerciales, en oficinas, etc, en el Casco Histórico, me parece que va en la línea correcta. Nosotros estamos trabajando para rebajar patentes comerciales, para rebajar los derechos que se cobran por el uso de los espacios públicos, por ejemplo un restaurante que quiere estar en una vereda que el ancho lo permite, en un paseo peatonal, etc”.
El jefe comunal aseveró que “es evidente que la pandemia, que el estallido, y que la mala gestión de Irací Hassler, que nos dejó inundado de comerciantes ilegales, de rucos, etc, han afectado la comuna. En esa línea, nos parece que hay que incentivar la inversión, pero nos preocupa sí una cosa: cómo vamos a compensar, cómo vamos a lograr equilibrar ese ingreso, que es parte de las contribuciones, y que dejaríamos de percibir y que lo necesitamos en seguridad, que lo necesitamos en una serie de otras áreas, como por ejemplo, también salud municipal”.
En esta línea, Desbordes adelantó que buscarán reducir el aporte que hace la comuna al Fondo Común Municipal, apuntando que “nos parece poco razonable que aportemos como si el costo, la carga nuestra, fueran solo de nuestros habitantes, nuestros vecinos. Y en esa lógica, valoramos la rebaja de contribuciones, pero nos interesa mucho saber qué va a pasar con los ingresos municipales, porque de verdad, no solo no nos sobra plata, nos falta mucha plata para poder hacer lo que necesitamos y lograr que Santiago nuevamente sea ese Santiago que conocimos hace unos años atrás”.
Desde el municipio detallaron que Santiago aporta anualmente cerca de $76 mil millones al Fondo Común Municipal, entregando un 65 % de su recaudación por este concepto, superando el porcentaje exigido a la mayoría de las comunas.
“El 35 % restante es fundamental para financiar servicios locales como seguridad, aseo, mantención del espacio público y apoyo social. Según nuestras estimaciones preliminares, esta modificación tendría un impacto equivalente al 17 % del presupuesto anual destinado a beneficios sociales directos para vecinos y vecinas”, puntualizó la municipalidad.