
La Municipalidad de Santiago pidió la renuncia anticipada a la rectora del Internado Nacional Barros Arana (INBA), María Alejandra Benavides, de acuerdo a lo confirmado por el municipio a través de un comunicado.
Según el documento, la solicitud fue presentada por la Dirección de Educación Municipal (DEM) de la comuna, luego de que se efectuara una evaluación desfavorable de la gestión de Benavides durante 2024.
“Todos los funcionarios públicos que asumen un cargo por Alta Dirección Pública o en el proceso del servicio civil, suscriben un convenio de desempeño donde se establecen metas, objetivos, etcétera”, explicó el alcalde Mario Desbordes, quien añadió que “estos convenios deben ser cumplidos; de lo contrario, la persona no está rindiendo lo que se acordó y para lo que postuló“.
“En ese contexto, la ex directora del INBA a estas alturas es una de las personas que al analizar los convenios de desempeño, se analizaron todos, no cumplió“, complementó el jefe comunal.
Los argumentos de la Municipalidad para pedirle la renuncia a la rectora del INBA
Al respecto, en el documento difundido por la Municipalidad de Santiago se detalló que la autoridad del INBA obtuvo un 56% de cumplimiento en los indicadores establecidos en su convenio de desempeño, cifra por debajo del 71% exigido como mínimo.
“Tras el análisis realizado por la evaluadora, la señora Benavides obtuvo un 56% de aprobación de su convenio, cifra insuficiente para continuar en su cargo como directora del INBA“, puntualizó el reporte de su desempeño.
A la vez, la evaluación estableció que en el trabajo de la rectora “se evidencian debilidades persistentes en la planificación estratégica, en la definición de criterios pedagógicos comunes y en la articulación efectiva con las trayectorias de aprendizaje de los estudiantes“.
“En el ámbito del liderazgo, se observa una conducción débil del equipo directivo, con escasa articulación interna y limitaciones para movilizar procesos que incidan en la mejora sostenida de las prácticas pedagógicas”, agregó el diagnóstico del trabajo de María Alejandra Benavides.
También recalcó que las acciones que desarrolló en torno al proyecto pedagógico y al desafío institucional “carecen de consistencia y seguimiento, lo que impide su implementación efectiva como ejes de transformación educativa“.
Apuntó también a que no se evidenció un enfoque sistémico por parte de Benavides
Además, aseguró que el trabajo de la rectora no se evidenció “un enfoque sistémico ni una integración clara con el desarrollo socioemocional y los principios de inclusión y equidad que debieran orientar este ámbito”.
Tras plantear que no se constató el cumplimiento de las tareas “ineludibles de carácter normativo y conocidas por todos los equipos directivos, el texto apuntó que se identificaron “debilidades en la preparación y gestión de estas tareas, incluso considerando la situación excepcional vivida por el establecimiento, que derivó en el retiro de documentación institucional por parte de la Fiscalía tras un hecho trágico ocurrido en la comunidad escolar”.
La petición de renuncia llegó en medio de la demanda laboral que interpuso Benavides contra la municipalidad y el propio Desbordes, tras alegar daño psíquico por declaraciones previas del alcalde y solicitando, entre otros puntos, una compensación económica y restricciones comunicacionales sobre su caso.