Un trágico e inesperado vuelco es el que vivió el caso de Luis Felipe Correa, joven que estuvo desaparecido desde el 21 de agosto y que se presumía estaba en Viña del Mar.
La única información que se tenía es que ese día, el joven de 19 años salió de su casa en San Bernardo y le avisó a su madre que iría a casa de una amiga. Ese mismo día, horas después, se comprobó que su celular fue geolocalizado en Viña del Mar, específicamente en Avenida Perú con 6 Norte.
Su caso, todos estos meses, fue investigado como el de una persona desparecida, hasta que la noche del miércoles la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile, su casa de estudios, confirmó su muerte.
Hasta el momento se desconocían detalles del hallazgo de su cuerpo, pero la tarde de este jueves todo cambió, puesto que el caso dio un vuelco que nadie esperaba.
Según consignó Emol, el cuerpo de Luis Felipe Correa estuvo todos estos meses en el Servicio Médico Legal (SML) como NN, puesto que no había sido identificado.
Lo cierto es que todo apunta a que el estudiante de segundo año de Sociología nunca llegó a Viña del Mar, sino que se quitó la vida en la estación Pedro de Valdivia del Metro de Santiago el 21 de agosto, mismo día en que salió de su casa.
En esa jornada, el tren subterráneo reportó a las 13:39 horas la suspensión del servicio en cuatro estaciones de la Línea 1 por persona en la vía.
Carabineros realizó el procedimiento y al no tener identificación alguna, el cuerpo fue encontrado como NN al SML. Recién el 4 de noviembre, lograron dar con su identidad. “Esto demuestra falencias en el proceso de identificación del SML. Falló el sistema“, declararon al medio antes citado.